La depilación masculina es cada vez más solicitada y encontramos que determinadas áreas son las que se tratan con más frecuencia. Es interesante que conozcamos cuáles son las causas que han llevado al auge de esta práctica, cada vez más ubicua.
Depilación de los hombres, ¿por qué está tan de moda?
La depilación tanto masculina como femenina ha sido considerada un tratamiento médico importante en muchas civilizaciones y a lo largo de la historia. Las motivaciones, sin embargo, no son solo estéticas. Hay algunos casos en que la depilación con láser tiene indicación médica. Con una cita gratuita podemos evaluar al paciente para decidir la necesidad y la modalidad del tratamiento.
La imagen
Vemos que las nuevas generaciones tienen estereotipos que han evolucionado. El vello no se considera ya un atributo relacionado con la virilidad. La imagen deseada es más neta y juvenil, y la depilación es una herramienta para conseguirla.
Motivaciones estéticas
Tanto hombres como mujeres consideran actualmente que exhibir un exceso de vello en piscinas, playas o gimnasios es antiestético.
Razones laborales
Encontramos con frecuencia que la depilación láser en el hombre responde a la necesidad de estar presentables en todo momento. En ocasiones, el vello facial puede llegar hasta los pómulos o el cuello; el afeitado cotidiano se hace difícil y deja una sombra oscura. Los modelos publicitarios también necesitan mostrarse sin vellos para coincidir con los estándares de su profesión.
Al hacer deporte
El vello puede dificultar la práctica deportiva. En algunos casos puede presentar resistencia al agua. La sudoración tiende a acumularse y ser más intensa en las zonas pilosas. También puede resultar incómodo a la hora de vestir prendas diseñadas para entrenar o competir.
Higiene
La presencia de vello facilita la acumulación de sudor y bacterias y dificulta la higiene, propiciando los olores inaceptables. También podemos facilitar la aplicación de productos cosméticos también se facilita con la ausencia de pelo.
Desempeño sexual
En muchos casos, la depilación íntima masculina puede facilitar las relaciones, aumentar la satisfacción y mejorar el desempeño de la actividad íntima.
Razones médicas
El exceso de vello puede favorecer la presencia de inflamación e infección de los folículos pilosos. Por otra parte, hay ciertas condiciones, como el quiste pilonidal sacro o el hirsutismo que se puede resolver o mejorar cuando aplicamos depilación láser, que elimine el vello definitivamente.
¿Qué zonas son las que más demanda tienen?
Si bien en todas las áreas de la anatomía masculina hemos observado un aumento en la demanda de depilaciones, hay algunas que son más solicitadas que otras. La más frecuente, con más del 50 %, es la genital total, que está asociada con un mayor goce sexual y con una higiene más lograda. Le siguen el pecho, las axilas y luego la espalda, también una zona muy solicitada.
La barba, por su parte, puede conservarse o tratarse en el caso de ser muy cerrada. El propósito suele ser no tener que afeitarse, a veces hasta dos veces al día. Las piernas, los brazos y el abdomen son zonas que se depilan también, pero nos las solicitan con menor frecuencia.
Depilación íntima masculina
La eliminación del velo en esta zona, como vimos ya, es muy solicitada. Puede abarcar solamente el área genital y las ingles o incluir otras áreas como los glúteos. En el estilo llamado full butt se elimina también la pilosidad perianal e interglútea.
Depilación láser masculina
Este método se basa en la capacidad de la luz para penetrar a través del vello y llegar al folículo, que se calienta y destruye. Por ello no tiene los inconvenientes de las cuchillas o la cera, que causan cortes, irritaciones, foliculitis o requieren arrancarlo. Además, podemos graduarla para eliminar las pequeñas molestias que se producen. Otra ventaja es que llega a los pliegues y rincones más difíciles de alcanzar y que estimula la producción de colágeno con lo que mejora la textura de la piel.
Con esta tecnología eliminamos los vellos que están en fase activa de forma irreversible. Se requiere mantenimiento, pues con el tiempo los folículos que estaban en fase de reposo empezarán a producir vello y habrá que depilar de nuevo. A medio plazo, la depilación termina por hacerse permanente. Las sesiones necesarias según la zona son las siguientes.
– Barba. Necesitaremos de 6 a 9 sesiones mínimo de 20 minutos para completarlo. La piel es sensible por lo que se recomienda espaciar las sesiones de forma trimestral. Además de eliminar la necesidad del afeitado, mejora la textura del cutis.
– Piernas. Es una zona de alta sensibilidad y amplia, que requiere de 6 a 10 sesiones de 90 minutos. Es adecuada para modelos y deportistas.
– Axilas. Es una zona con sensibilidad media y aplicaremos de 6 a 9 sesiones de 20 minutos cada una, en periodos de 3 meses.
– Glúteos. La sensibilidad de esta zona puede ser alta y las sesiones serán trimestrales, de 45 minutos y en número de 6 a 10.
– Depilación íntima. La zona tiene una alta sensibilidad y presenta muchos pliegues. Las sesiones serán trimestrales y durarán 40 minutos.
– Tórax. Administraremos de 6 a 10 sesiones de una hora cada una. Serán trimestrales y la depilación puede hacerse por partes al ser una zona extensa.
– Espalda. Necesitaremos de 8 a 10 sesiones de una hora cada una y trimestrales.
La depilación masculina es una ventaja desde muchos puntos de vista. Si la información ha resultado interesante, puedes pedir cita con un especialista que resuelva todas las dudas que tengas.